2008 acaba en unas horas. Recuerden que el último minuto del año tiene 61 segundos, por eso de ajustar el tiempo coordinado universal (UTC)

Y para las campanadas, si otros años han probado trucos facilitados por pobres adivinos y tarotistas como llevar prendas de un determinado color o echar oros a las copas, innoven. Aprovechando la conjunción planetaria que puede que se produzca -o no- con Mercurio, rindan tributo echando al champán/cava/sidra/bebida-nacionalista-preferida unas gotas de mercurio. Los metales pesados se van a llevar en 2009, año del buey, la crisis y la no-recesión. Y si precisan de ropa de un color determinado, no se compliquen la vida. Un toque hippie para los gallumbos y a correr.
Pasen buen resto.